Lo malo de ser ninja es que viviendo en las penumbras y recovecos de la casa, pasas desapercibido hasta para los gases. Por eso si me pego un peaco creyendo que estoy solo en el piso y sales de golpe aturdido por el fuerte olor, te lo comes enterito. Es más, se lo ha comido y se le han quitado las ganas de cenar.
domingo, 5 de junio de 2011
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5 comentarios:
Decía mi abuela que NO COMER POR HABER COMIO...
Pues eso le ha pasado a ese, que no ha cenado porque ya se ha comido lo tuyo.
Anonimo no estaban hablando de tu padre, es sobre un compañero de piso ninja. A lo mejor es que no sabes leer, que por otro lado no me extraña...
Que ilusión, teneis un gilipollas de fan, creía que los trolls mongolos habían desaparecido
Gandalf, hijo, que le vamos a hacer.
Flippy descartó a dos o tres chimpancés para su nuevo concurso y se han dedicado a comentar en mondovega.
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