miércoles, 12 de noviembre de 2008

EL CUARTO DEL MAL

Debido al aluvión (alubia grande) de peticiones para que contemos la historia del cagané, aquí la tenéis:

Era una mañana de domingo, como otra cualquiera, cuando unos jóvenes dicharacheros se dirigían a la casa de un amigo a recogerlo para ir a jugar su partidillo de fútbol mañanero. La noche anterior fue larga y se bebieron el támesis en vino pero ellos, jóvenes y lozanos jugaban al fútbol por las mañanas.
La alegría llenaba las calles de la aldea al paso del jolgorio producido por las historias de conquistas de la noche anterior de aquellos jóvenes.
El más avezado de los chicos llamó al portero (automático, no casillas) para solicitar la presencia del compañero futbolero dormilón, pero una voz tenebrosa salió con fuerza del altavoz al grito de: subid, subid que os voy a enseñar una cosa. Los amigos sorprendidos subieron raudos y veloces a ver cual era la sorpresa que les tenía preparada la madre del amigo, llamémosle ANDY.

En la puerta con bata de guatiné, brazos cruzados y cara seria se erguía la figura de la madre de ANDY, lo que llevó a estos jóvenes a perder la sonrisa en un segundo.
La madre ofuscada los dirigió hacia el cuarto de ANDY y al abrir la puerta pudieron ver entre la tenue luz que entraba por los agujeros de las persianas un bulto que se suponía era ANDY rodeado de pequeños bultos y manchas por medio cuarto.
Los jóvenes supusieron en un principio que esas manchas eran vómito, a lo que se les escapó alguna sonrisa cómplice, a la vez que mirábamos a la madre con incredulidad, "la que había montado la madre por un vómito de su hijo, cuando el que más y el que menos por estas fechas navideñas había visitado al señor roca cargado de comida digerida en la boca" Pensaron los chavales.

La madre sorprendida al ver que no había reacción de los jóvenes ante tan dantesco espectáculo decidió darle color al cuadro que había pintado su hijo, poseído tal vez por Goya en su etapa negra, dirigiéndose a abrir la ventana.
Pero nada más abrir la ventana y entrar aire y luz al cuarto, el vómito se convirtió en mierda y el olor a cerrado en olor a mierda.

los 2 jóvenes se quedaron petrificados viendo el mapa de mierda marcado en las sábanas que ANDY se había dedicado a pintar durante los giros propios de una noche de borrachera en la cama.

Tras esta experiencia los jóvenes juraron no hablar nunca del tema, aunque ya sabéis: joven es a jurar lo que político es a honrado.

5 comentarios:

carlosmondovega dijo...

Gilipollas, con el último y el antepenúltimo párrafo se me ha escapado una carcajada y casi me liga mi jefe...
Ya he recibido dos llamadas telefónicas de conocidos para preguntarme por la identidad del caganet.

Haters dijo...

jaja Qué gran narración.

mis4ratos dijo...

confesiones:
ayer, contando a mi hermano1 la historia del cagón, me recordó q mi hermano2 tb se cagó una vez en el taxi de vuelta a casa. él tenía 15 y yo 19. aún vivíamos todos con mis padres y nos tocó eliminar las pruebas (limpieza de mi hermano incosciente incluida). fue tan asqueroso q conseguí borrarlo de mis recuerdos.
estoy en la biblioteca y me han llamado la atención por descojonarme. muy buena historia.

ektwp dijo...

Un historia con suspense, buen guión y un final terrorífico.
Como se entere Amenábar estrena en 1 añito!

Anónimo dijo...

Vamos, que ANDY LA CAGÓ!!!

Juas, juas!! Que bueno!! ¿Quien es el artista?