Al fin voy a montarme en avión a mis ventimuchos (gracias a los regalicos de mi hermana y cuñado), y llego a la conclusión que gracias a bin laden y los americanos va a ser un finde oloroso.
Como no vamos a facturar habrá que ir comío, vestío y lavao. Ni desodorante, ni crema de dientes, ni colonia, ni cortauñas, ni vaselina para adaptarme a los precios de la ciudat condal.
Será fácil verme en Montmeló en las gradas de la fórmula 1 por la tele, soy el que no tiene gente alrededor en un radio de 3 metros.
jueves, 13 de marzo de 2008
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1 comentario:
cuenta cuenta... bribón.
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